Hola, amigos ya estamos de vuelta a la normalidad,después de casi tres meses cuesta un poco retomar la vida que hacíamos antes, pero yo soy de las que creo que siempre hay que tener ánimos para seguir pasando etapas.
Durante estas vacaciones he vivido momentos inolvidables,y uno de ellos es del que quiero hablar en esta entrada.
Se trata del hallazgo de los restos de el vecino de villauril que asesinaron en la aciaga época del Franquismo.Parecía increíble que la historia que siempre se había contado se convirtiese en una realidad gracias a la constancia de una familia.
Durante los dos primeros días de búsqueda los ánimos decaían con el paso de las horas y con cada carga que cogía la pala.Pero el tercer día todo dio un vuelco y cuando se atisbó lo que era parte de un cráneo de la expectación a la alegría todo fue cuestión de segundos.
Es verdad que en esos momentos nadie sabía la identidad de esos restos pero para los que estábamos allí y sobre todo para su hija y para sus nietos se acababan 72 años de angustia y de dolor.
Yo personalmente me dediqué a grabar con mi cámara lo que estaba sucediendo porque sabía que estaba viviendo un trocito de historia, negra, pero historia al fin y al cabo.Sin darme apenas cuenta estaba inmersa en mis pensamientos intentando imaginar el porque de esta muerte,¿a quién le había hecho daño un chico de 24 años? pero no encontraba la forma de contestarme ya que no existe respuesta que pueda justificar todo lo que aquel 4 de Agosto de 1938 pasó en el fondo de ese prado.
Me alegro que por lo menos esa familia pueda descansar pensando que su ser querido ya no va a estar enterrado como si fuese un perro en un paraje solitario y sombrío sin derecho ni tan siquiera a tener una cruz con su nombre.
Los días siguientes al hallazgo de los restos yo pensaba en la forma que iba a contaros esto y en el porque mucha gente no está conforme en que las familias de los desaparecidos intenten buscarlos, no lo puedo entender pero como esto si es democracia tienen todo el derecho de opinar y yo todo el derecho de pedirles que ellos se pongan en el pellejo de todas esas familias y seguro que cambian de opinión.
Decirles a sus nietos que su padre aquel niño que ya nació huérfano desde donde esté se sentirá orgulloso de que todos vosotros desde vuestra unidad halláis encontrado lo que él durante toda su vida buscó y no pudo hallar, y acabo diciendo el eslogan que llevaban los chicos de la asociación para la recuperación de la memoria:
"VOSOTROS SOIS LOS NIETOS, SOIS LA PAZ"
y espero que todas las familias de España luchen para devolver la dignidad a unas personas que el único error que cometieron era el de vivir una época que ojalá nunca regrese.